Israel: mercado estratégico para Argentina

Israel importa más del 80% de la carne vacuna que se consume en el país. Argentina es su principal abastecedor de carne vacuna, tanto congelada como enfriada.
El mercado está dominado por pocos importadores y distribuidores, lo que contribuye a que los precios al consumidor estén entre los más altos del mundo.
Aunque el gobierno ha intentado promover la competencia y reducir precios, el impacto de las medidas adoptadas ha sido limitado, por la estructura del mercado y las barreras regulatorias existentes.
Tamaño e importancia del sector
El consumo anual de carnes bovinas ronda entre 110 mil a 120 mil toneladas de carne vacuna, de las cuales alrededor del 80-85% corresponde a carne importada, en su mayor parte es congelada. La escasa producción local se comercializa fresca.
Aunque el pollo es la carne más popular, la carne vacuna tiene un lugar importante en la dieta, especialmente en festividades y restaurantes.
La alta dependencia de las importaciones responde a la baja producción doméstica, junto con exigencias regulatorias vinculadas al bienestar animal y al cumplimiento de las normas de kashrut (rituales dietarios judíos).
La carne importada se distribuye ensupermercados y carniceríasespe- cializadas, con una parte significativa destinadaalcanal HORECA(hoteles, restaurantes y catering).
El consumo anual per cápita de carne vacuna en Israel es de 19,6 kg, y ha tenido un importante crecimiento: actualmente es un 50% mayor que en 2015.
Precios de la carne bovina entre los más caros del mundo
El nivel de precios constituye un factor que condiciona una mayor expansión del mercado.
Israel figura entre los países con la carne vacuna más cara del mundo. En supermercados, el precio promedio de la carne fresca ronda los 80-120 NIS/kg (aproximadamente 22-33 USD/kg), dependiendo del corte y de si cuenta o no con certificación kosher.
En el último año, los precios de la carne en Israel subieron entre un 2% y casi un 10%, según datos de Ultra Finance. Algunos ejemplos:
- Entrecot: de NIS 145,7 (US$ 40,21) a NIS 152 (US$ 42) por kg (+4%).
- Pechuga de pollo: de NIS 38,6 (US$ 10,64) a NIS 42 (US$ 11,59) por kg (+9%).
- Muslos de pollo: de NIS 60 (US$ 16,56) a NIS 62 (US$ 17,11) por kg (+3%).
Según el Índice de Precios al Consumidor de marzo 2025, hubieron los siguientes incrementos en productos cárnicos: carne vacuna congelada +1,6%; pollo +1,4% y cordero +1,1%.
Los supermercados ofrecen precios más accesibles, pero las carnicerías mantienen su clientela gracias a la calidad y el servicio personalizado. Muchos israelíes están dispuestos a pagar más por carne fresca y atención directa.
Factores que inciden en el mercado
Los factores a los que se atribuye el elevado nivel de los precios son en en el orden local:
- Concentración del mercado: Pocos importadores y mataderos concentran la oferta, limitando la competencia.
- Falta de carniceros especializados: Esto obliga a muchas carnicerías a ofrecer productos envasados, generalmente más caros.
Asimismo, existen factores externos asociados a:
*Aumento de los costos de producción y de insumos: la evolución ascendente de las cotizaciones de los cereales y oleaginosas ha incrementado los costos para criar animales, particularmente para la cría de aves, que es el principal rubro cárnico de origen local.
*Dependencia de las importaciones: no sólo carne, sino también de hacienda en pie. Un tercio de la carne vacuna consumida procede de ganado importado y faenado localmente; más del 40% es carne congelada de origen externo, una proporción que baja al 17% en el caso de la carne enfriada, mientras que apenas un 14% proviene de hacienda nacida y criada en Israel.
*Costo de certificación kosher y volatilidad del tipo de cambio, que inciden en los precios finales.
Impacto de la guerra y cambios de consumo
El conflicto con Hamas generó una caída de la demanda de cortes premium (como el entrecot), y paralelamente estimuló el consumo y el precio de los cortes más baratos, como la carne picada. Debe tenerse en cuenta que, para compensar la caída de ventas de cortes caros, los importadores subieron los precios del resto de los cortes. Como resultado de ello, sus precios registraron alzas de hasta dos dígitos.
Medidas adoptadas fueron insuficientes
A fin de contener los precios, el gobierno amplió las cuotas de importación sin arancel y simplificó procesos de certificación. No obstante, la efectividad de estas medidas ha sido reducida, debido a la estructura concentrada del mercado.
Además, crecen las presiones para limitar la importación de ganado vivo y fomentar la de carne procesada, en línea con las preocupaciones por el bienestar animal.
Importaciones en alza
La fuerte dependencia que el consumo israelí de carnes bovinas tiene de las importaciones ha determinado un nuevo avance en los primeros meses de 2025. Pese al conflicto bélico y los aumentos de precios, hubo un crecimiento del 20%, en términos de valor, de carnes enfriadas y congeladas.
Porcentualmente, el aumento más importante se dio en las carnes enfriadas (31%), aunque también fue significativo en el rubro del congelado (13%). Las carnes con hueso, si bien siguen en un volumen bajo, también han experimentado una suba remarcable, particularmente las congeladas.
Israel también importa ganado vivo (principalmente de Australia y Europa del Este) para su engorde y posterior faena local, aunque este segmento está siendo reducido gradualmente por razones de bienestar animal.
Israel: mercado de MERCOSUR
Argentina es el principal proveedor externo de carnes bovinas, tanto congeladas como enfriadas.
Uruguay, que fue el segundo en orden de importancia, ha sido desplazado por Brasil y Paraguay, que han tenido una diferencia pequeña en los primeros meses de 2025.
Polonia tiene una incidencia importante en las carnes enfriadas, al igual que Estados Unidos, pero el comercio de congelado se encuentra claramente concentrado en los cuatro proveedores del Mercosur.
Entre enero y abril de este año, Argentina representó el 44% del valor total de las importaciones, mientras que Brasil y Paraguay contribuyeron con un 17% cada uno; 12% correspondió a Uruguay y el 7% a Polonia. Los miembros de Mercosur representaron el 90% del total.
FUENTE: Informe Ganadero