La carne argentina “contragolpea” en Asia

Mientras el país se defiende ante la investigación china sobre el impacto de sus crecientes importaciones, una comitiva público-privada promocionará el producto en el interior del gigantesco cliente y buscará acceder a otros mercados asiáticos. Cuál es la estrategia para evitar sanciones y fortalecer el posicionamiento en la región.
Desde fines de año, China lleva adelante una investigación para determinar si el incremento de las importaciones de carne vacuna entre 2019 y el primer semestre de 2024, tuvo impacto negativo sobre su producción. En ese marco, en abril hubo una audiencia en Beijing donde los proveedores hicieron su descargo frente a las autoridades asiáticas y la próxima semana una comitiva china visitará un campo y un frigorífico en la Argentina.
Finalmente, se resolverá si se establece algún tipo de restricción al producto, algo que se considera muy probable.
La audiencia reunió a unas 180 personas, incluyendo funcionarios y empresarios de la Argentina, Australia, Brasil, Uruguay y Estados Unidos, además de importadores y productores chinos, entre otros.
“La Argentina hizo una sola presentación, dividida en tres partes, a cargo del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA), frigoríficos exportadores y funcionarios nacionales. Los argumentos de defensa principales fueron que les exportamos carne congelada, que no compite con el producto local enfriado, y que el volumen es muy menor en relación a su gigantesco mercado, por lo que no tiene impacto sobre la producción china”, dijo a Valor Carne Georges Breitschmitt, flamante presidente del IPCVA, resaltando que esta posición “es similar a la de Brasil y Uruguay”.
“Todos los países tuvieron lineamientos parecidos, menos Australia, que básicamente dijo que el problema se da a raíz de Brasil y la Argentina que tienen la mayor proporción del mercado”, agregó.
Sin embargo, para el dirigente, esto no implica que finalmente haya países más perjudicados que otros. “En realidad, la investigación afecta a todos los que le venden carne a China y no podría haber sanciones en particular porque estarían infligiendo normas de la Organización Mundial del Comercio (OMC)”, planteó.
Siguiendo con la investigación, una delegación del Mofcom (Ministerio de Comercio de China) visitará la Argentina entre el 13 y el 14 de mayo. Recorrerán un campo en Chascomús y una planta frigorífica (aún no se definió si Offal o Frimsa) para constatar in situ cómo es el proceso de producción en el país. Además, mantendrán una reunión en las oficinas del IPCVA para recabar información estadística sobre las exportaciones argentinas, a China y otros destinos.
“Quieren ver el funcionamiento de punta a punta, incluyendo la cría, el engorde, la faena y la despostada. Buscan información que en última instancia les ayude a justificar eventuales sanciones”, explicó Breitschmitt, precisando que “la investigación está a cargo de varios ministerios y dependencias oficiales que, terminado el proceso, se reunirán para analizar todos los datos y tomar decisiones”.
Cabe aclarar que quién habilita los campos y frigoríficos para China es la Aduana y, según fuentes del sector, los distintos organismos son muy independientes entre sí, por eso el Mofcom viene a conocer la ganadería argentina de primera mano.
Tras la inspección en la Argentina, los delegados chinos irán a Brasil y Uruguay, en la región, así como a los Estados Unidos y Australia.
Este sería el punto final de la investigación, antes de discutir las medidas a tomar. Y si bien en un principio se planteó que el veredicto se conocería en agosto, para Breitschmitt el proceso “va bastante rápido” por lo que podría adelantarse.
¿Habrá sanciones sí o sí? “La posición de la Argentina es que no corresponde la aplicación de ninguna sanción”, sostuvo Breitschmitt, aunque admitió que es muy probable que “si está haciendo todo esto, haya alguna consecuencia”.
En ese sentido, se especula con la aplicación de cuotas, aranceles o una combinación de ambas. “Alguna medida van a tomar, esperemos que sea la más benévola y corta posible”, afirmó.
¿La guerra comercial con Estados Unidos puede influir en la decisión? “Algo de ruido genera, pero hoy China está estoqueado en carne y el producto norteamericano llega a nichos específicos. Por lo pronto, bajaron bastante las compras hasta que se calme todo, se reacomoden las variables y se vea cómo sigue. Por su puesto, en estos meses hay mucha incertidumbre, mandás un contenedor y tratás de negociar con el importador quién se hace cargo si hay cambios de condiciones durante el traslado”, reveló.
Otro factor a considerar es el rol de los importadores chinos. “Ellos siempre están ávidos de comprar carne, el interés está. De todos modos, el mercado chino se desplomó porque hay cierto freno en la economía. Ahora, en la Sial, vamos a poder confirmar si nos van a acompañar en nuestros propósitos”, adelantó.
Expandiendo mercados
En paralelo a la investigación china, las empresas seguirán con sus acciones de promoción de la carne argentina en Asia. El evento central será la participación en la Exposición Sial de Shanghái, del 19 al 21 de mayo, donde 25 empresas serán protagonistas en el stand de la carne argentina, coordinado por el IPCVA.
Previo al evento, habrá una gira por Japón e Indonesia, donde una comitiva público-privada buscará destrabar el acceso a esos destinos.
En relación a Indonesia, el presidente del IPCVA lo calificó como un destino “de mucho interés por la carne” con una mirada muy transaccional: “van a los bifes”, aseguró en claro juego de palabras. “Preguntan ‘cuánto me sale’, ‘cuánto tiempo tarda en llegar’. Pero aún queda resolver un punto sanitario y otro no menor en lo religioso”, anticipó.
“Ellos pretenden que las plantas sean 100% halal y hay que ver cómo se puede flexibilizar eso, porque es muy difícil cumplir con ese requisito dado que no es rentable tener una industria exclusiva para ese rubro”, sostuvo.
En cuanto a Japón, el objetivo es habilitar la exportación por fuera de la barrera sanitaria de la Patagonia. “Hoy en día hay un solo frigorífico que exporta, y lo que queremos es ir para que nos habiliten todo el país. Vamos a pelear eso y hacer algunas acciones con importadores además, para seguir promocionando la carne”, aseguró.
En China, en tanto, habrá reuniones para tratar de avanzar en la habilitación de menudencias, una cuenta pendiente desde 2023.
Y más allá de la participación en la Sial, la comitiva va a tener reuniones con autoridades de Aduana en Beijing. “Además de tocar el tema de la investigación, nos dimos cuenta de que la carne argentina aún es poco conocida en China. Nuestros clientes están básicamente en Shanghái por lo que vamos con la idea de expandir fronteras para promocionar la carne hacia el interior”, reveló.
Finalmente, Breitschmitt destacó el rol del IPCVA en todo el este proceso. “Los mercados los abre el Estado, pero el Instituto tiene una función importante en acompañar y empujar las misiones para que las aperturas se concreten. Acá participamos todos, productores, industriales y funcionarios, y nuestro trabajo ayuda a que la carne argentina pueda seguir compitiendo en el mundo”, concluyó.
FUENTE: Valor Carne