Fiebre aftosa: Argentina consolida su estatus de país libre y avanza hacia una vacunación más focalizada
La OMSA mantiene a la Argentina como país libre de fiebre aftosa, con o sin vacunación. En 2025, se aplicaron casi 50 millones de dosis y el SENASA refuerza la vigilancia sanitaria para sostener este logro histórico. Una resolución reciente ajusta la estrategia de inmunización con miras a reducir dosis en animales adultos.
Argentina ratificó en 2025 su posición como país libre de fiebre aftosa, reconocimiento otorgado por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA). Este estatus, que combina áreas con y sin vacunación, es el resultado de más de dos décadas de políticas sanitarias sostenidas, campañas de vacunación sistemáticas y una vigilancia epidemiológica permanente.

El país cuenta con una amplia zona libre con vacunación, que abarca el centro y norte del territorio, además de tres áreas libres sin vacunación: Patagonia (Norte y Sur), Patagonia Norte A y los Valles de Calingasta en San Juan. Estas regiones reflejan los avances logrados desde el Plan Nacional de Erradicación de Fiebre Aftosa (Resolución Senasa 5/2001), implementado tras la epidemia del 2000-2001.
Durante la primera campaña de 2025, se vacunaron 49,4 millones de bovinos, cifra que representa casi la totalidad del stock nacional. Desde 2010, el esquema contempla dos campañas anuales: una general para todas las categorías y una segunda que excluye a vacas, toros y bueyes, que reciben solo una dosis anual.

Una nueva resolución del SENASA (711/25) profundiza esta tendencia: a partir de 2026, la segunda dosis será obligatoria únicamente para terneros y terneras. El objetivo es optimizar recursos y evitar la sobrevacunación en ejemplares que ya han recibido múltiples dosis o se encuentran próximos a faena.
En paralelo, el Programa Nacional de Fiebre Aftosa del SENASA mantiene un monitoreo permanente mediante muestreos en terneros centinela —animales jóvenes sin vacunar—. Entre 2018 y 2024 se analizaron más de 36.000 muestras en 2.400 establecimientos, sin detectar circulación viral.

Este sistema de control, junto con las campañas de vacunación, sostiene la ausencia total de fiebre aftosa en el país, consolidando a la Argentina como referente regional en sanidad animal y abriendo la puerta a nuevos mercados internacionales.

FUENTE: Ruralnet