Skip to main content

El consumo de carne volvió a superar los 50 kg, ¿y ahora?

En lo que va del año, el consumo interno ha logrado absorber todo aquello que la exportación no llegó a embarcar. Pero más allá de ese dato, tal vez lo más sorprendente es que no lo hizo vía precios. Por el contrario, el precio de la carne vacuna se ha sostenido durante estos meses ligeramente por encima de las tasas de inflación, lo que denota la aparente firmeza que presenta hoy el consumidor local.

Puesto esto en cifras: en los primeros seis meses del año, de las 1.516 mil toneladas de carne vacuna producidas en el período, la exportación solo se llevó el 24%, es decir, unas 370,5 mil toneladas, un 19% menos que lo embarcado un año atrás. Por lo tanto, en manos del consumo interno quedó un saldo equivalente a 1.153 mil toneladas, lo que implica un 11,4% más que lo absorbido en igual período del año previo.

Expresado en términos per cápita —utilizando siempre la media móvil de los últimos 12 meses—, el consumidor argentino pasó de comer 47,6 kilos de carne el año pasado a 50,2 kilos este año, tomando los datos a junio. Es decir que, en promedio, incorporó a su dieta más de 5,5 kilos de carne vacuna. Pero además, sumó 1 kilo en el consumo de carne aviar —pasando de 44,9 a 45,9 kilos per cápita— y 1,3 kilos de carne porcina, acercándose a los 18 kilos per cápita anuales. Por lo tanto, considerando las tres principales carnes, localmente se alcanzó un consumo superior a los 114 kilos por habitante, según los datos que surgen de la estadística oficial.

Todo ello con precios que, hasta la primera mitad del año, lejos de reflejar una presión bajista, terminaron registrando incrementos interanuales superiores a la inflación. En el caso de la carne vacuna, la suba fue del 59% en los últimos doce meses; del 62% para la carne porcina; y del 48% para la carne aviar, frente a una inflación minorista que finalmente logró mantenerse por debajo del 40% interanual.

FUENTE: Agrofy News