Skip to main content

Estabilidad y oportunidades en Sial Shanghái

La edición 2025 de Sial Shanghái dejó, según Michel Decker (director de Opticarnes), la sensación de una feria tranquila y sin grandes sorpresas. China confirmó su papel de mercado clave para la carne vacuna uruguaya: los compradores mantuvieron el interés y los precios se preservaron en niveles similares a los de la semana previa, aunque persiste la búsqueda de nichos y valor agregado para diferenciar la oferta.

Decker observa una feria menos concurrida que en el pasado. Atribuye la baja afluencia a una “depuración” posterior al Covid-19, al hecho de que Uruguay y otros proveedores ya están consolidados y a que la actividad comercial tiene su pico en el segundo día.

En comparación con las últimas dos ediciones, el foco del debate se desplazó: en 2023 preocupaban las existencias acumuladas en China; en 2024 el tema dominante eran los stocks (estimados entonces en hasta un millón de toneladas); en 2025 la atención se centra sobre todo en los precios. Los inventarios visibles corresponden —dice— a carne importada este mismo año, señal de que el exceso previo se habría absorbido. Un factor clave fue el desvío de grandes volúmenes brasileños a Estados Unidos antes de la suba arancelaria, lo que alivió la presión de stock en China y trasladó la carga a EEUU.

Respecto a los nichos de mayor valor, Decker confirma que la demanda por carne terminada a grano está firme y la oferta limitada, lo que sostiene los precios. Australia aprovecha cierta ventaja logística y arancelaria, mientras que la apertura de plantas estadounidenses para China sigue estancada y sujeta a vaivenes políticos.

Califica la feria con un “7” sobre 10: resultado positivo y necesario para mantener presencia y contactos, aunque con margen para mejorar.

Al analizar los destinos clave, destaca que EEUU fue el “mercado estrella” de 2024 y debería seguir siéndolo: el ganado allí está caro y la escasez de hacienda es notable. Sin embargo, el arancel adicional del 10% impuesto el 2 de abril frenó el entusiasmo. Muchos importadores adelantaron compras de carne brasileña y ahora les cuesta trasladar el sobrecosto al consumidor final. Además, la cuota libre de arancel que poseen otros grandes abastecedores relativiza el impacto del 10% sobre Uruguay. Tras la tarifa, los negocios de volumen prácticamente se detuvieron y se limitan a nichos o contratos cerrados con anterioridad. Decker advierte que los riesgos actuales son más macroeconómicos (recesión, inflación) que cárnicos.

Respecto al mercado europeo, para el trader “se mantiene firme: los precios del congelado continúan estables y el enfriado subió con fuerza, empujado primero por Argentina y seguido de cerca por Uruguay”. Aunque se percibe cierta sensación de techo en las cotizaciones actuales, el bloque europeo se consolidó como una alternativa viable para canalizar carne para industria que EEUU dejó de absorber tras la suba arancelaria.

En síntesis, Sial Shanghái 2025 ratificó la estabilidad del negocio con China, reflejó oportunidades crecientes en nichos grainfed, en tanto la coyuntura es desafiante pero todavía prometedora en EEUU y Europa. Para Decker, la clave seguirá siendo diversificar destinos y agregar valor para sostener la competitividad uruguaya en un mercado global cada vez más dinámico.

FUENTE: Tardáguila