Saturday, 04 February 2023

Sorpresa, se despertó el precio de la hacienda

Sorpresa, se despertó el precio de la hacienda

El salto ocurrió en enero, cuando la valorización estacional se da en febrero o marzo. Qué venía sucediendo previamente en el mercado y cuáles serán las consecuencia para los operadores del consumo interno y la exportación.

 

Desde el viernes 20, los valores de machos y de hacienda joven comenzaron a trepar con gran fuerza, lo que se repitió en cada jornada de remates subsiguiente, hasta la de ayer en la que pareciera que las aguas se han calmado un poco.

En seis jornadas se acumuló un incremento de más de $100 por kilo vivo, que representó alrededor del 40%. Menudo aumento.

Tras ocho meses de fuertes bajas consecutivas, en términos reales, en la que se perdió más del 40% del nivel récord absoluto que se alcanzó en abril, se recuperó aproximadamente la mitad de ese deterioro en este plazo de 14 días.

Muchas previsiones indicaban que las cotizaciones debían remontarse. Pero una cosa es que deban y otra que suceda.

Además, esta variación de precios se dio en un momento, si se quiere, atípico. Son más comunes las valorizaciones en los meses de febrero o marzo que en enero.

Tampoco hubo un factor identificable que lo disparara. El mercado de Cañuelas venía abastecido por encima de lo habitual, ayudado en parte por la sequía que, afortunadamente, amainó en amplias zonas.

Tampoco se trató de algún aumento desmedido de la demanda que sigue penando en medio de la larga crisis económica general.

En las últimas semanas veníamos comentando que el hecho de que la hacienda hubiera encontrado un piso, frente a la inflación, durante el trimestre noviembre-enero y que el sector comercial (frigoríficos consumeros, matarifes, carniceros) hubiera logrado reconstruir sus márgenes a costa de la baja de la hacienda, creaba un contexto en el que se pudiera experimentar alguna recuperación.

Lo difícil era pronosticar el cuándo y el monto de la misma. Debemos confesar que en ambos sentidos este aumento nos sorprendió.

Un punto especial es el tema de las vacas. Sólo recibieron una “migaja” del aumento que lograron machos y jóvenes. Y no tiene mayor explicación.

La dificultad reciente en la oferta de las otras dos categorías no volcó masivamente a la industria exportadora a reemplazarlas con más vacas o, en todo caso, lo que hicieron no tuvo mayor impacto en su valor.

Tratemos de ver las consecuencias de estos movimientos sobre la demanda.

Los operadores del mercado interno que, como dijimos más arriba, habían logrado recomponer sus márgenes con algún exceso (de entre el 10 y 15%) se las van a ver en figurillas para trasladar estos nuevos valores y otra vez empiezan a correr desde atrás, como hicieron la mayor parte del tiempo entre fines de 2020 y principios de 2022.

Los exportadores, que estaban comenzando a ver alguna mejora de precios en Europa y en China, vuelven al principio como en el juego de la oca. El aumento del valor en dólares de los novillos (mercado oficial menos derechos) que suma 20% en dos semanas, los deja completamente fuera de juego. Varias plantas decidieron dejar de pasar precios en medio de la tormenta y muchas redujeron sus faenas, incluso alguna dio vacaciones por una semana, situación que no se puede alargar demasiado.

Además, si se analiza que el novillo de consumo aumentó casi 40% frente al casi 30% del novillo trazado, se sabe que el mercado les va a ir pidiendo algo más todavía.

A todo esto hay que agregar la posibilidad de que el gobierno trate de intervenir, aunque no sirva para nada, como se viene demostrando desde mayo de 2021, pero que va a acarrear mayores penurias a muchos de los operadores.

En base a pasadas experiencias, tras una recuperación semejante, hay que pensar que el mercado encontrará un nuevo balance, que posiblemente se parezca al precio recién alcanzado. Pero que esto no significará que haya estabilidad, pudiéndose esperar oscilaciones fuertes, con idas y vueltas.

Tampoco parece posible que siga la carrera, alcanzando el nivel record de abril. Tendría que haber una intervención de lo más torpe para lograrlo.

Nos esperan semanas turbulentas, con gran presencia mediática, hasta que el polvo se asiente.

Esta situación no sirve para tomar decisiones de largo plazo.

Mostramos en el gráfico la evolución del precio real mensual del novillo desde 2007. Hay que tener en cuenta que el promedio de enero arrojó $330 pero que el de fin de mes llegó a $415. Es decir, ahora se ha recuperado el valor que se observó entre junio y julio pasados y que supera la enorme mayoría de los registros de estos 15 años que se muestran.

FUENTE: Miguel Gorelik - Valor Carne

 

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