Expectativas ante el nuevo escenario político
El cambio de gobierno tras el triunfo, el domingo pasado, de la fórmula peronista de Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner en las elecciones presidenciales tiene al sector cárnico expectante, dado que marca el fin del Gobierno que más impulsó su crecimiento en las últimas décadas.
Si bien la incertidumbre es mucha, en el sector no creen que se vaya a volver a los cupos de exportación y vedas que eran moneda corriente durante el gobierno del kirchnerismo; por un lado, porque la crisis económica ya achata la demanda y tranquiliza la competencia entre mercado interno y externo, y por otro, porque el próximo gobierno estará sumamente necesitado de dólares genuinos y netos, de los que el mayor aportante del país es por lejos el sector agropecuario. Lo que sí se da por seguro es que habrá un aumento quizá importante de los derechos de exportación, por las mismas razones.
Hasta el momento, lo que prima es el “wait and see”. Lo que sí generó un efecto concreto fue el refuerzo del llamado “cepo cambiario” la misma noche del domingo, cuando se conoció que el resultado electoral no habilitaba el ballotage (ya que la fórmula ganadora superó el 45% de los votos válidos), que restringió la compra de dólares para atesorar de 10.000 a 200 mensuales. Esto empujó la brecha entre el precio oficial del dólar (que ayer martes rondaba los Ar$ 58,5 para la compra y los Ar$ 63,5 para la venta) y el del mercado paralelo (denominado “blue”), que ayer rondaba los Ar$ 67 luego de haber tocado los Ar$ 74, en un juego muy dinámico que nadie da por definido.
Esta incertidumbre, sumada a las expectativas alcistas de los ganaderos y al enorme incremento del poder de compra de los frigoríficos, llevó tanto a la retención de animales (como demuestran los bajísimos ingresos al Mercado concentrador de Liniers, y las recomendaciones de aguantar más los animales encerrados por parte de los feedloteros), como a un salto en torno del 10% en sus cotizaciones.
La mayor restricción impuesta por el llamado cepo cambiario impulsó una fuerte suba en los precios de la hacienda de exportación. Los novillos mestizos, luego de casi un mes de estabilidad, subieron entre Ar$ 12 y 13 por kilo en gancho y quedaron en torno de Ar$ 145 por kilo en el caso de los mestizos de mejor calidad, mientras que los novillos más rústicos se encuentran en torno de Ar$ 140. En cuanto a las vacas, cuyo proceso alcista se ve apoyado por la fenomenal demanda de China, “que prácticamente se lleva todo”, según expresan los analistas, los valores subieron alrededor de Ar$ 15, con lo que quedó rondando los Ar$ 135 a 140 por kilo en gancho.
FUENTE: Faxcarne