CRECER SIGNIFICA FAENAR MAS PESADO
Un análisis de los grupos CREA determino que la duración de la invernada se redujo en forma acelerada de 18 a 12 meses volviendo el sistema más frágil; la diferencia con el peso medio de faena de Estados Unidos es de 145 kilos.
Los índices reproductivos ganaderos no mejoran desde hace más de 50 años con un promedio nacional de destete del 63-64 por ciento dijo Fermín Torroba, técnico del Observatorio Ganadero y de la coordinación de la Comisión de Ganadería Aacrea en una jornada ganadera organizada por los grupos CREA del Sudoeste al analizar algunos de los indicadores de eficiencia del stock argentino.
Torroba también describió las variaciones que sufrió el stock en los últimos años. Entre 2003 y 2008, este fue de 58 millones de cabezas mientras que en 2008-2009, las existencias cayeron y hoy quedan 6 millones menos en relación con el promedio.
En 2010 y 2011, el consumo de carne vacuna se ubicó en los mínimos históricos: 55 y 59 kilos por habitante, favoreciendo el incremento de la participación de otras cadenas, como la del cerdo y la del pollo. “Esto podría haberle dado a la Argentina la posibilidad de cambiar la cultura del consumo de carne vacuna y abrir una puerta a su exportación, liberando la tensión entre mercado interno y externo. Esta posibilidad sigue vigente con visitas al futuro”, agrego el orador.
Para entender qué puede pasar con la oferta de carne en la Argentina, Torroba considero cuatro variables determinantes de la producción: la duración de la invernada, el porcentaje de hembras en la faena, el peso medio de res y las cantidades exportadas.
Recordó que en los últimos anos la duración de la invernada se redujo en forma acelerada de 18 a 12 meses. “La inclusión del corral en los sistemas productivos fue determinante para que esto sucediera, por su alto nivel de eficiencia para terminar a los novillos”, explicó.
Sin embargo, este proceso, que generó una mayor oferta instantánea, tuvo como contrapartida una caída del peso medio de faena y una disminución del stock de macho, volviendo al sistema mucho más frágil.
Otra de las variables que definen como va a ser la oferta en los próximos años es el porcentaje de hembras en la faena. “Durante 2013 no se aumentó el stock de vacas”, revelo el disertante, quien aseguró que “las consecuencias de este proceso no se van a sentir hoy ni el año próximo, sino después, con una menor oferta de terneros”.
Con respecto al peso medio de faena, Torroba comento que en la Argentina es de 220 kilos, mientras que en los Estados Unidos este indicador ronda los 365 kilos, una diferencia de 145 kilos. "La categoría que tienen la posibilidad de aumentar el peso de faena son los novillitos y los terneros. Para lograr un crecimiento de 25 kilos, deberíamos pasar de faenar 4 millones de terneros y novillitos que hoy se liquidan con 300-360 kilos, respectivamente, a 480” advirtió el técnico.
Para Torroba este es un escenario que hoy parece muy lejano, porque este proceso tiene que ser impulsado por una demanda que pague un plus por el mayor kilaje.
FUENTE: La Nación